Forma bolitas o barritas pequeñas con las manos y colócalas sobre papel encerado.
Lleva al congelador por 30 minutos para que se endurezcan un poco.
Mientras tanto, funde el chocolate con una cucharadita de aceite de coco a baño maría o en microondas (en intervalos de 30 segundos).
Saca las bolitas del congelador y baña cada una en el chocolate fundido usando un tenedor.
Déjalas secar sobre una bandeja con papel encerado o rejilla. Puedes decorar con virutas de chocolate o coco por encima.
Refrigera al menos 1 hora… ¡y listo! Bombones cremosos, crocantes y deliciosos 🤤
✅ Consejo extra:
Puedes usar chocolate amargo para contrastar con la dulzura del coco.
Duran bien 5–7 días en la nevera (si no desaparecen antes 😅).