Cocina a fuego medio, removiendo constantemente hasta que espese y se despegue del fondo (unos 30-40 minutos).
Vierte la mezcla en una bandeja engrasada o forrada con papel encerado y nivela.
Deja enfriar completamente y refrigera por unas horas.
Corta en cubitos y, si deseas, rebózalos en azúcar.
Guarda en un recipiente cerrado a temperatura ambiente por hasta 5 días.