Sigues adelante sin rodeos, a veces demasiado rápido. Tus convicciones son fuertes… aunque te resulte difícil cambiar de opinión.
La iguana: la reserva
Observas mucho, hablas poco. Tu calma es impresionante, pero puede dar una impresión de distancia.
El cerdo: desbordante entusiasmo
Cuando algo te apasiona, no haces las cosas a medias. ¿El reto? Encontrar el equilibrio en tus placeres cotidianos.
El críquet: sensibilidad
Percibes rápidamente lo que sucede a tu alrededor. Una ventaja, siempre y cuando también recuerdes tomarte un respiro.
El caballo: orgullo discreto

Valiente y apasionado, te gusta ir rápido y lejos. Reconocer la ayuda de los demás podría impulsarte aún más.
El delfín: espontaneidad total
Creativo y dinámico, te encanta improvisar. Un poco de planificación te ahorrará muchos problemas.